domingo, 30 de marzo de 2025

EL AÑO QUE CASI DESAPARECIÓ EL HUEVO DEL CASTILLO

Foto del nevero derruido
La popular nevera en forma de gran huevo que está al lado del Palacio Real de Olite/Erriberri estuvo a punto de desaparecer hace casi cien años cuando el Ayuntamiento de 1930 intentó reutilizar las piedras para parchear calles, iniciativa que frenaron las autoridades.

         En tiempos de crisis económica y fuerte emigración a América el consistorio consideró la oportunidad de aprovechar los sillares del Huevo para arreglar la cercana rúa Villavieja. 

El movimiento no pasó desapercibido a la Comisión de Monumentos de Navarra y el Gobierno Civil, que consiguieron paralizar la intención de tirar el nevero situado junto a la torre de las Tres Coronas, 

El Huevo y, delante, la balsa desaparecida
        El Ayuntamiento presidido por Fausto Ochoa Martínez de Azagra argumentó el supuesto escaso valor del Huevo, que no pertenecía al conjunto del castillo y que había llegado a la ruina según aparece en fotos de la época. 

Además, replicó, podía ser foco de infecciones y concentración de basuras, por lo que había obligado ya a sellar la balsa de sus inmediaciones que retenía el agua necesaria para hacer el hielo. 

          A finales de agosto el ayuntamiento también se reunió para preparar las fiestas del 13 de septiembre. Por vez primera, apareció el “Erri-Berri” como nombre del equipo de fútbol del pueblo, antes Acero FC, con Alfredo Eraso como presidente. Los aficionados pidieron una ayuda de 250 pesetas para organizar un partido. 

          Por su parte, el cartel taurino se cerró con la compra de tres novillos y diez vacas. Tampoco faltaron los fuegos artificiales. En este contexto, el primer teniente de alcalde, Elifio Bariáin, reclamó la construcción de un frontón, al ser “el deporte propio de este país” y porque en el municipio “existe tanta afición a él y se carece de sitio apropiado”.

sábado, 22 de marzo de 2025

OLITE 1930, UN PUEBLO EN MANOS DE POCOS APELLIDOS

Con la Dictadura de Primo de Rivera en agonía y los efectos de la crisis mundial del 29 en la mochila, el Ayuntamiento de Olite/Erriberri se renovó el 25 de febrero de 1930 por votación censitaria en el que las grandes fortunas y los mismos apellidos se repartían el poder en vísperas de que con la II República aquel oligopolio político saltara por los aires.

    En un momento en el que la monarquía de Alfonso XIII ya declinaba el vecindario decidía poco y, de verdad, eran los propietarios importantes los que tenía la sartén por el mango en una localidad con 2.844 habitantes a la que correspondía 13 representantes municipales. De ellos, siete salían entre los mayores contribuyentes y otros seis entre los que más votos habían obtenido en las anteriores elecciones de 1917, o sea exconcejales.

            De los acaudalados del pueblo fueron designados Félix García Torres, Cipriano Torres Echarri (exalcalde), Julián Eraso Pérez y Vicente de Miguel Torres (ambos exconcejales), Fausto Ochoa Martínez de Azagra, Santiago Torres de Miguel (también exedil) y Elifio Bariáin Lerga. 

            De los antiguos concejales de 1917 volvieron al Ayuntamiento Luis García Lacalle, Facundo Abaurre Echegoyen, Servilo Labarta Urdín, Sabas Corcín Navarro, Tirso Echaleen Baigorri y Adriano Úriz Muguiro. 

           En segunda votación fue alcalde con siete votos Fausto Ochoa. Otro gran propietario Elifio Bariáin, ocupó la primera tenencia y la concejalía de comunales. Los meses siguientes se desató una cadena de dimisiones de representantes de las mayores fortunas. 

Primero renunció Vicente de Miguel. Después Julián Eraso. Les reemplazaron Pedro Izco y Vicente Carricas Inda, quienes a su vez también dimitieron para que pasara el puesto a Andrés Muguiro Balduz y Eulalio Leoz Mendía. Este último también abandonó en favor de Asterio Echarri Arangoiti. Entre todos conformaban el pódium de los apellidos que mangoneaban el municipio. 

            Otro foco de poder era la Junta de Veintena a la que, por ejemplo, había que consultar cuando se habilitaban algunos presupuestos municipales. La componían los ocho mayores contribuyentes. En abril de 1930 se sentaban en ella Julio Torres Elarre, Caya Díez Gómez, Salvador Ferrer Galbete y los responsables de la fábrica Harino Panadera Olitense. 

            Entre los siguientes cuatro mayores contribuyentes se sorteaban otros tantos puestos, que recayeron en Asterio Echarri Arangoiti, Vicente de Miguel, Julián Eraso y la viuda de José Sola.

             Las mismas familias, de una u otra forma, colonizaban los centros de decisión y controlaban las mayorías tanto del Ayuntamiento como de la Junta de Veintena. Al pueblo llano le quedaba poco más que la protesta. A la vez la sociedad se trasformaba y, por ejemplo, el 22 de abril de 1930 se instaló el teléfono en la Casa Consistorial. “Enterados que es muy conveniente”, el ayuntamiento autorizó para colocarlo un gasto de 22 pesetas y 13,50 más para la cuota mensual.

martes, 18 de marzo de 2025

AVANZA LA CLIMATIZACIÓN DE LA CASA DE CULTURA DE OLITE

Salón de actos en pleno acondicionamiento
El salón de la Casa de Cultura de Olite/Erriberri se halla estos días en obras para adaptar un nuevo recuperador de calor y sistema de ventilación climatizada al espacio inaugurado en los años 90 con aforo para unas 200 personas.

         Las obras se benefician de una ayuda obtenida en los presupuestos de Navarra a través de una enmienda que introdujo Geroa Bai y salieron con un presupuesto de ejecución de 60.694 €. También se va a sustituir la iluminación antigua por led más eficiente.

viernes, 14 de marzo de 2025

HACE 5 AÑOS EL COVID TAMBIÉN PARALIZÓ OLITE / ERRIBERRI

Se cumplen cinco años de la declaración del estado de alarma con motivo de la pandemia del covid-19. El sábado 14 de marzo de 2020, el vecindario de Olite/Erriberri también recibió incrédulo una noticia que transformó su vida y puso en jaque al mundo. Un día antes el Ayuntamiento se había adelantado al clausurar espacios como el Parque municipal. Pronto cerraron las puertas el Parador, la Oficina de Turismo, el Palacio Real, bares y sociedades.

      Resultó muy extraño escuchar la megafonía de un patrol de la Guardia Civil que recordaba la alerta en plena calle o como después la brigada municipal fumigó la rúas con una tractor cisterna cuando no se sabía cómo se contagiaba el virus o se agotaban en las tiendas los guantes de goma y se forraban de plástico hasta los pomos de las puertas. No había mascarillas y las mujeres voluntarias las fabricaban con retales de tela. Uuuf, qué pesadilla.

martes, 4 de marzo de 2025

PRESUPUESTOS DE 6,2 MILLONES CON APOYO DE LA MAYORÍA

Solo la concejala del PP votó en contra
Con los votos que suman Agrupemos/Elkartu (4) y PSN (2) y la abstención de UPN (4) el pleno del Ayuntamiento de Olite/Erriberri aprobó los presupuestos que este año son de 6,2 millones. Únicamente el PP (1) voto en contra.

            Las mayores inversiones son para las obras de saneamiento y alumbrado de las naves del polígono de la Avenida de Beire (700.000 €) y el cambio de luminarias eficientes en el municipio (700.000 €).

           Además, se van a acometer proyectos con financiación de enmiendas de los partidos a los presupuestos de Navarra: Ascensor en la zona del túnel (EH Bildu), gradas para el Frontón (PSN) y monumento al Príncipe de Viana (Geroa Bai).

          El presupuesto también guarda partidas para calles, mejoras de urbanismo o el colegio, entre otras.

martes, 11 de febrero de 2025

LAS HUELGAS DE 1934, RAÍZ DEL GOLPE TAMBIÉN EN OLITE

Nuevo libro de Bueno y Arcocha
Mikel Bueno y Elorri Arcocha acaban de publicar “Navarra, 1934. El año de las revoluciones sepultadas”, un interesante libro sobre la importancia, a veces rebajada, de las huelgas campesinas que reclamaron en víspera de la masacre del 36 la devolución de las tierras comunales que fueron núcleo del conflicto en localidades como Olite/Erriberri.

             El trabajo editado por Mintzoa sintetiza las protestas de las que se cumplen 90 años en el contexto de una comunidad hija de la emigración en la que entre 1877 y 1930 más de 100.000 personas salieron normalmente hacia América a buscarse la vida en una Navarra que contaba con algo más de 350.000 habitantes y donde el 70% de los navarros eran campesinos.

             Los autores recuerdan que precisamente fue en Olite/Erriberri cuando en 1882 se dieron las primeras revueltas contra la privatización de las corralizas municipales, con protestas, el secuestro del yerno de un propietario o el asesinato del hijo de otro terrateniente, alteraciones del orden que también se dieron en Tafalla, Caparroso o Miranda donde también murieron cuatro personas.

             El libro cuenta cómo en 1934 la II República dio un giro y pasó a gobernar la derecha del Partido Radical y la Ceda, con dirigentes que, por ejemplo, habían participado en congresos del partido nazi. En este momento el Estado tenía la mayor proporción de religiosos del mundo, solo tras Italia, y el analfabetismo superaba el 30% de la población.

            En Navarra los terratenientes concentraban el 87% de los campos y los jornaleros se veían forzados a salir. Hasta 1960, Navarra fue el segundo territorio que más emigrantes dio, por delante de Galicia y Extremadura, recuerdan los autores.

            El vínculo de la Iglesia navarra con el carlismo y los corraliceros provocó que las reformas agrarias de gobiernos progresistas se contaminaran de fricciones religiosas e interpretaran como ataques al orden tradicional.           

            En lo tocante a las corralizas, los sindicatos agrarios reclamaban que el Estado las comprara y redistribuyera porque los ayuntamientos no las habían vendido en propiedad, como decían los terratenientes, sino como derechos de aprovechamiento de hierbas y aguas por lo que las indemnizaciones tenían que tocar solo estos términos.

Las huelgas de 1934 tuvieron dos momentos, en junio y en octubre. La primera, entre los días 5 y 12 en temporada de cosecha del cereal, fue relevante en Olite/Erriberri. Pararon los tajos e incluso, el día 17, fue detenido en la localidad el secretario de la UGT de Navarra, Miguel Escobar. 

La huelga general de octubre, más conocida por los sucesos de Asturias, también tuvo seguimiento relevante en Tafalla o Peralta/Azkoien. Terminó con las sedes obreras clausuradas por el Gobierno central, que en Navarra destituyó más de 30 ayuntamientos de izquierdas entre ellos el olitense.

       Los alcaldes y concejales fueron sustituidos a dedo por otros derechistas. “So pretexto de las movilizaciones de octubre… dieron un auténtico golpe de estado en el poder municipal…” y las derechas lograron hacerse también así con el control de la Diputación de Navarra en víspera del golpe de estado.

 “El exterminio político hacia las izquierdas vivido en Navarra a partir de julio de 1936 se realizó, fundamentalmente, en aquellas localidades donde la conflictividad por el comunal y las corralizas había sido de gran importancia… Navarra fue el territorio del Estado con mayor número de asesinados por cada mil votantes del Frente Popular”. 

https://www.elolitense.com/2024/10/hace-90-anos-la-revolucion-se-llevo-el.html

martes, 4 de febrero de 2025

LA FOTOGRAFÍA DE LA BISABUELA JAURRIETA Y SUS HIJOS LOS ANSAS

Familia Ansa Jaurrieta, 10/9/1948
La figura de la madre ha sido importante en nuestra cultura y en torno al matriarcado del hogar han girado las decisiones importantes de la familia, así que la bisabuela de quien esto escribe, Vitorina Jaurrieta, juntó hace casi 80 años a la prole que había tenido con Alejo Ansa, a sus hijos e hijas, también a nietos y nietas, y se hizo esta bonita fotografía delante de las escalericas de la iglesia de Santa María de Olite/Erriberri, y así sus descendientes nos podemos reconocer hoy caras y hasta gestos. Qué gran idea la de Vitorina. Ahora prácticamente no hay imágenes así. A ver si las recuperamos.

            De arriba abajo, de derecha a izquierda, se ve a Fulgencio Ansa y su mujer Amparo Sesma. Después van los hermanos Consuelo y Julio Ansa, Alejandro Martínez y Fructuoso Ansa.

            En la fila de medios, Pedro y María Ansa, la bisabuela Vitorina, Eusebio Martínez Ansa, Jenara Ansa y Francisca Blasco.

            Debajo se ve a la mayoría de la chiquillería. Primero a Blasita Ansa y Montse Aragonés. Y luego toda una retahíla de nietos ansas, Ángel, Pedro Mari, Félix, Ana Rosa y Jesús

(Gracias a Conchi Sola Zulaica por prestar este tesoro tomado el 18 de septiembre de 1948)