jueves, 23 de abril de 2020

OLITE, MURALLAS Y PUERTAS CONTRA LA PANDEMIA

El recinto urbano de Olite tenía en la Edad Media una buena muralla que dominaba una veintena de torres y cuatro puertas de las que en tiempo de peste solo permanecía abierta y muy vigilada la del Portal de Falces también conocido como de las Cabras, porque por el atravesaba el rebaño municipal que iba a pastar al Monte, o del Carmen y del que hoy solo queda una hornacina con la virgen de su advocación.
Puerta de Tafalla, antes del Mercado
            Cuando la amenaza de pandemia se acercaba, y fue muchas veces, este único acceso desde el Este del municipio era custodiado por dos guardias y varios regidores, que como los ediles actuales eran nombrados por el vecindario pero por demarcaciones de barrio.
            Los habitantes de la villa, en tiempo de peste, no podían acoger a ningún forastero en casa si no tenían permiso del Concejo (Ayuntamiento), “so pena de diez ducados” de 1599 según dejó escrito el investigador Alejandro Díez en su autoeditado “Olite, historia de un reino” (1984). Cuando no había epidemia, los portales se cerraban por la noche, a las 20 horas en invierno y una hora más tarde en verano. Una campana situada en la torre del Chapitel anunciaba la clausura de la muralla... (Ver más)